La defensa de los Saints obra milagros en Halloween – NFL 2021

El maratón de football del domingo continuaba con el partido entre los Buccaneers y los Saints. Ambos equipos llegaban después de una victoria y con posibilidades de afianzarse dentro de la NFC Sur. Los Saints consiguieron llevarse el duelo a pesar de la lesión de su quarterback titular, haciendo un partido muy serio en defensa ante los de Bruce Arians.

Abrimos el segundo turno de partidos con una sorpresa, los Saints conseguían ganarle la partida a los actuales campeones del Superbowl, los Buccaneers. Desde el primer minuto los Saints fueron ganándoles cada batalla a los de Tampa. Si bien es verdad que en el tercer cuarto Tom Brady y compañía parecía que les iban a poner contra las cuerdas, e incluso llegaron a ponerse por delante, los Saints controlaron el partido de principio a fin.

Un gran partido defensivo por parte de los New Orleans Saints que pone en jaque el primer puesto de la división. ¡Veamos cómo fue el gran partido de los Saints ante los campeones del Superbowl!

Los Saints tenían un claro objetivo desde el principio

El partido comenzaba con los Buccaneers atacando pero rápidamente la posesión cambiaba de manos. Los Saints sí que movían cadenas pero no eran capaces de pasar del medio campo y se tenían que jugar un cuarto down, que no conseguían por lo que de nuevo Tom Brady saltaba al campo. Esta vez sí que movían cadenas y con un pase en corto hacia Chris Godwin que encontraba los huecos para llevarles hasta la redzone. Sin problemas Brady volvió a conectar con Godwin para inaugurar el marcador, 7-0.

Volvían los Saints a la carga, y entre Kamara e Ingram les sacaban de su propio campo. Jameis Winston se sumaba a las carreras y en varios scrambles se acercaban a la zona de anotación. Cuando estábamos terminando el primer cuarto del partido. Y desde ahí Winston buscaba en la derecha a Tre’Quan Smith en la zona de anotación poniendo el empate en el marcador, 7-7. Los Buccaneers tenían ahora la ocasión de volver a ponerse por delante. Empezaban casi desde medio campo y a base de carreras iban llegando a campo de los Saints. Pero no podían continuar con el drive y sacaban al equipo de punt al campo.

Los Saints volvían al campo pero con demasiada mala suerte, ya que un mal golpe a Winston le dejaba lesionado y tenía que salir Trevor Siemian a sustituirle. Y de nuevo la posesión cambiaba de manos. Los visitantes intentaban ganar ventaja en el marcador, pero un golpe a Tom Brady hacía que se le cayese el balón de las manos siendo recuperado por Onyemata dejándoles en muy buena posición de campo para anotar. Poco a poco iban avanzando a pesar de los intentos de la defensiva de Buccaneers de intentar pararlos. Llegados a los últimos metros no podían poner la guinda a un gran drive y tenían que conformarse con tres puntos antes de llegar al two minutes warning, 7-10.

La ofensiva de los Buccaneers salía de nuevo al campo para intentar volver a colocarse por delante en el marcador. Pero a pesar de empezar con un gran carrera de Giovani Bernard en el siguiente snap, Tom Brady se confundía y era interceptado por Gardner-Johnson en su segundo error del partido, dejando a los locales en un gran situación de campo para ampliar la ventaja. Lo tenia fácil Siemian que con un pase hacia Smith ya se metían dentro de las últimas diez yardas y desde ahí no tuvieron complicaciones para conectar con Alex Armah y ampliar la ventaja local, 7-17. Sin apenas tiempo, los Bucs decidieron consumirlo con una carrera e irse a los vestuarios para ajustar para las segunda mitad.

Parar a Brady fue la consigna de esta gran defensa

De vuelta del descanso, los Saints volvían a tener la oportunidad de ampliar su ventaja en el electrónico. Y comenzaban de la mejor manera posible, un pase en profundidad hacia Kevin White metiéndoles en el campo de los visitantes. Ahora les costaba más el ir avanzando y tenían que jugarse un cuarto down para seguir con esta primera seria ofensiva. La defensa de los Buccaneers tenían problemas para detener el avance y rápidamente los Saints se veían en la situación de 1&Goal. Ahí la defensa de Bruce Arians plantó cara, pero de nuevo jugándose un cuarto down  conseguían el objetivo de abrir una brecha en el marcador con una carrera de Alvin Kamara por la izquierda que ponía el marcador en 7-23.

Ahora eran los visitantes los que salían al terreno de juego para su primer drive de esta segunda parte. Con tranquilidad y sin demasiados problemas salían desde su propio campo moviendo cadenas. Pero lo que realmente les hacía avanzar era un gran carrera de Godwin. Que tras recibir un pase en corto encontró una autopista por la izquierda que les metía de lleno en la redzone rival. En la siguiente jugada se producía un fumble. Pero finalmente era considerado como pase incompleto ayudando a los de Bruce Arians a mantener con vida el drive. Poco más tardaron en encontrar las diagonales con un pase corto a Giovani Bernard que entraba por fuerza en la endzone acercando el resultado, 14-23.

Aún les separaban bastante puntos y los Saints podían ampliar la ventaja en su siguiente serie. Sin embargo estos no eran capaces de mover cadenas en primera instancia y el equipo de despeje saltaba el campo para devolver el balón a los de Tampa Bay. Los de Tom Brady no podían dejar pasar esta ocasión si querían meterse en el partido de nuevo. Y no perdían el tiempo. En seguida Brady buscaba en largo a Mike Evans que recibía perfectamente y dejaba a los Buccaneers a menos de un field goal de darle la vuelta al marcador, 21-24.

Estábamos llegando al final del tercer cuarto, y el partido estaba bastante apretado. Los Saints sacaban a su ataque al campo para un nuevo drive. Pero por segunda vez consecutiva sin llegar al primer down tenían que devolver la posesión a los visitantes. Estos aunque fueron capaces de mover cadenas al principio rápidamente se veían forzados a un cuarto down. Y decidían sacar al equipo de punt al campo, cuando ya estábamos entrando en el último cuarto del partido. Así que los de New Orleans podían aumentar la ventaja y encarrilar el partido. Les costaba mover cadenas al principio, sin embargo una carrera de Mark Ingram les metía de nuevo en terreno rival. Aunque ahí terminó su avance y se tenían que conformar con tres puntos para ampliar su ventaja a 21-26.

Pero aún así los Buccaneers no bajaban los brazos y de nuevo salían al terreno de juego para sumar puntos. Avanzaron rápidamente hasta la divisoria de los dos campos y desde ahí Tom Brady lanzó una bomba que encontró Cyril Grayson que estaba completamente solo a la espalda de la defensa y ponía a su equipo por delante con un gran touchdown, 27-26. Pero poco les duraba la alegría a los visitantes, con tan solo un punto de diferencia los Saints realizaban un gran drive bajando el reloj hasta el two minutes warning. A pesar de que no pudieron terminarlo en touchdown, un field goal les volvía a poner por delante y tan solo restaba un minuto y medio para la finalización del encuentro, 27-29.

Además en el siguiente ataque de los Bucs, P.J Williams se adelantaba a Godwin e interceptaba un balón que conseguía retornar para un pick six que dejaba a los Saints con el partido prácticamente ganado, 27-36. Los de Bruce Arians necesitaban dos anotaciones para darle la vuelta al partido y se quedaban sin tiempo. Lo intentaron pero la defensa de Saints hizo un último esfuerzo por pararles y no darles ni una oportunidad de darle la vuelta al marcador. Los locales solo tuvieron que arrodillarse y firmar su quinta victoria en esta temporada.

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